Tú, a veces cielo, a veces infierno.
Espacios donde habitan la impudicia,
la pureza.
Tus labios se alzan
transitando por mi piel.
Mi boca aguarda:
tú, torso terso,
regazo delicado:
seda.
Todo tú, fuera de tiempos,
de espacios,
Yo, asciendo al empíreo